Podría parecer que crear la marca de una empresa o la de un pueblo es para el caso lo mismo. Pues… sí pero no. Es cierto que el objetivo final es el mismo; transmitir de la forma más simple y reconocible una serie de valores.
Lo que ocurre es que rara vez nos encontramos con clientes cuya empresa tenga siglos de historia, leyendas, tradiciones… y cientos de personas con todo el derecho a opinar sobre el resultado.
El Ayuntamiento de Santaliestra nos pidió ayuda para crear su logotipo. No había una referencia previa, y cuando vimos la cantidad de elementos diferentes que debían aparecer, nos preguntamos cómo íbamos a hacer para meter toda esa información en un logo.
Pues… Así ????